Intencionando mi Agua: Un Ritual Cotidiano de Magia
¡Hey chicxs del agua! ¿Quién más se apunta al reto de beber con intención? Les cuento sobre mi hábito mágico que ha transformado mi vida: ¡intencionar cada sorbo de agua! Es un acto simple lleno de positivismo y energía que quiero compartir con ustedes. ¿Listxs para sumarse?
Ritual Mañanero de Gratitud:
Cada mañana, al despertar, agradezco por el nuevo día que comienza. Mi primer sorbo de agua se convierte en un abrazo líquido de la naturaleza, llenándome de energía renovadora y positivismo.
¿Cómo lo hago? Al dar gracias, visualizo la energía positiva fluyendo hacia el agua que estoy a punto de beber. «Con este sorbo, agradezco por la vida que fluye en mí».
Ducha Mágica de Renovación:
¡La ducha es mi momento mágico! Antes de abrir el grifo, visualizo cada gota que toca mi piel como energía purificadora. Es un ritual de renovación para cuerpo y alma.
¿Cómo lo hago? Mientras abro la llave, imagino que el agua que cae lleva consigo la capacidad de limpiar y renovar mi ser. «En cada gota, renuevo mi energía y dejo atrás lo que ya no necesito».
Infusión de Intenciones:
Añadir hierbas o frutas al agua es mi truco favorito. Cada ingrediente tiene su propia magia. Por ejemplo, la menta para la claridad mental o las rodajas de fresa para la alegría. ¡Descubre tus combinaciones mágicas!
¿Cómo lo hago? Mientras añado las hierbas o frutas, me concentro en la intención que quiero para mi día. «Que esta infusión lleve consigo la alegría y claridad que necesito».
Empoderamiento Femenino en Cada Sorbo:
Conecto con mi bruja interior. Beber agua se convierte en un recordatorio diario de mi fuerza y feminidad. ¡Cada sorbo es un acto de empoderamiento!
¿Cómo lo hago? En cada sorbo, reconozco la conexión entre la feminidad y el elemento agua. «En este sorbo, afirmo mi poder como mujer».
Agua de Sanación para Dolencias:
Cuando siento alguna dolencia, aprovecho el poder del agua en la ducha. Visualizo que el agua lleva consigo energía curativa, aliviando cualquier malestar. ¡La mente tiene el poder de influir en el cuerpo!
¿Cómo lo hago? Concentro mi mente en la idea de que el agua que me rodea en la ducha actúa como un bálsamo, llevando consigo la capacidad de aliviar y sanar. «Bendigo esta agua y la consagro para que alivie cada celula de mi cuerpo, si hay algo malo, en este momento se esta regenerando”